¿Cómo protegerse con un círculo de energía? Un Ritual de Depuración

La energía es una poderosa arma de defensa, esta es la responsable de que se cumpla la ley de la atracción y que de forma espiritual los seres humanos estén conectados entre sí y con la naturaleza.

Para trabajar con energía lo primero que el hombre necesita es comprender la importancia de su significado y lo vital que se hace emplear la misma en pro del bien.

El hombre se encuentra cubierto por un campo de energía astral denominado aura, este según su color revela datos de la personalidad del individuo a la par que actúa como escudo protector contra las energías negativas.

En otras ocasiones las absorbe perjudicando espiritualmente a la persona, de ahí el necesario establecimiento de rituales para garantizar la protección y la depuración del campo energético del ser humano.

Ritual poderoso para crear protección con un círculo de energía blanca:

Para obtener la protección utilizando la energía lo primero es situarse en un lugar en el que te sientas seguro y cómodo.

Para realizar este ejercicio puedes estar sentado o acostado preferiblemente vistiendo ropa ligera y dejando a un lado los zapatos.

Debes comenzar a través de la respiración, con ayuda de una inspiración profunda, durante un par de minutos debes mentalizarte protegido y seguro.
Continúa inspirando profundamente, a la par que exhalas suavemente.
Visualiza un círculo de energía en forma de luz blanca sobre tu cuerpo, que te envuelve haciéndote sentir en el interior de un capullo, en el que te sientes a gusto y bien resguardado.

Detente a sentir cómo esta energía que forma el capullo se mueve mientras va envolviéndote suavemente a la par que mentalizas como poco a poco los fragmentos de energía negativa son expulsados de tu aura dejándola libre, pura y renovada.

Enfoca tus ideas en sentir que el capullo que se ha creado de energía protectora impide pasar energía negativa a tu cuerpo.
Te sientes ligero, por lo que nada te afecta y te encuentras en armonía con el medio en el que te envuelves.
Permanece cinco minutos con esta última visualización de tu cuerpo donde te encuentras a gusto.

Continúa realizando respiraciones profundas y relájate.

Suavemente imaginas que el capullo se va tornando invisible a la vez que se hace indestructible, mentaliza que estarás rodeado de él durante mucho tiempo por lo que no debes temer, ni perder la fe.