La Religión Yoruba como madre ancestral aconseja y advierte a sus hijos sobre la importancia de llevar una vida tranquila y en armonía con todos los seres vivos que existen sobre el plano de la tierra.
Preceptos y enseñanzas de la religión yoruba:
Respetar los mandamientos de la Religión Yoruba y seguir sus preceptos, permite tener una existencia más sana y pacífica para con nuestros amigos y enemigos, siendo esta la manera de engrandecer la religión y no faltar a sus enseñanzas.
1. No hacer daño a nadie
La Osha enseña la importancia de conducirse en la vida por el sendero del bien, esta se consagra para buscar la paz y la salud fundamentalmente, a través del santo se obtiene el adelantamiento espiritual.
2. No odiar, ni recriminar a un Abure o hermano religioso
Una vez que los practicantes de la Regla de Osha (santería) se inician en sus conocimientos forman parte de la rama religiosa de la cual nacen, lo cual exige unidad dentro del templo, apoyo entre hermanos y comprensión la cual es tan necesaria para superar los infortunios que puedan presentarse en el camino de la existencia.
3. No tomar venganza ni herir a un hermano
La religión exhorta a fomentar el perdón de las ofensas, está estrictamente prohibido tomar venganza física o mediante sortilegios entre hermanos de religión, pues esto constituye una manera de profanar el Panteón Yoruba.
4. No envidiar a tu semejante
La envidia es un sentimiento vil, que hace daño solo al que lo alberga en su corazón, despojarse de este sentir es una forma de intentar ser un buen creyente y un mejor ser humano.
5. No decir mentiras
Las mentiras conducen al hombre por un camino oscuro y solitario, los Orishas castigan con furia a los mentirosos especialmente a los que calumnian a otros para ascender en la vida.
6. No caer en malos pasos, huir de las corrupciones, los vicios y las habladurías
Los Orishas recomiendan a sus hijos evitar los excesos como las bebidas alcohólicas, el adulterio, el consumo de sustancias ilícitas como los estupefacientes y mantenerse ajeno al adulterio.
Indican centrarse en la búsqueda de un porvenir mejor sin mediar habladurías y malos entendidos por estos considerarse osogbos (energías negativas).
7. No ser impulsivo, emplear de forma consecuente la inteligencia
Se recomienda a todos los religiosos del mundo emplear la inteligencia en el bien y el desenvolvimiento, así como tomar las decisiones determinantes para la vida con la mente serena y con tranquilidad para de esta forma tratar de no incurrir en el error.
8. No traicionar
La traición es una mala consejera, las deidades africanas aseguran que es un alto pecado traicionar a la persona que depositó su confianza en otro, pues esta acción habla de falta de valores que no forma parte de las doctrinas que rigen las casas santorales.
Este infame acto es castigado y acarrea atraso.
9. No robar, no hacer falsas promesas y no maldecir a ningún ser humano
El respeto por los bienes ajenos es primordial si se desea obrar con buena fe, las promesas no cumplidas traen desgracias a los devotos pues son faltas graves a la religión, de igual modo son las maldiciones las cuales traen desgracias y arrastran muchas consecuencias funestas sobre los hombres.
El buen religioso debe obrar con la virtud del ejemplo la cual es recompensada por Olofin.
10. No matar, respetar la vida de los semejantes
El asesinato es el más grave de los sacrilegios, solo Dios es el encargado de poner fin a la vida de las personas, el hombre debe luchar por un mundo mejor donde exista la paz y la convivencia sana, para contribuir de este modo con la evolución de la humanidad.
11. No maldecir, ser agradecido
El agradecimiento es una de las acciones más hermosas que existen, debemos agradecer por estar vivos, por ser saludables, por superar un obstáculo, por un bien obtenido, por la prosperidad de un ser querido, por tener fe y poder aferrarse a esta en los momentos difíciles y por muchas otras cosas.
Aunque ante los ojos de los insensatos se consideren pequeñeces son beneficios que para las personas inteligentes constituyen las verdaderas riquezas de la vida.