Rezo para que Yemayá interceda por una causa difícil ¡Ruego a la Madre!

Yemayá la madre de todos los humanos es una orisha guerrera.

La dueña del agua salada es una santa de carácter fuerte y gran corazón que socorre a los afligidos en las adversidades y castiga con furia a las personas que sin motivo hacen daño a los demás.

Ante los pies de esta santa acuden los religiosos que desean cruzar el mar y emprender nuevos caminos, otros van movidos por sueños, mientras otros invocan su protección para vencer la enfermedad.

Para resolver las causas difíciles se acude ante Yemayá la diosa que es abogada en la tierra de los humanos intercediendo ante Orula para que libre a los hombres de los osogbos que se presentan en su destino.

Oración poderosa a Yemayá para solucionar casos difíciles

Mediante la oración para solucionar causas difíciles el hombre acude al mar para rezarle a Yemayá acompañado de:

Un ramo de rosas rojas y
dos velas blancas.

Adorada diosa Yemayá la más fuerte de las Orishas,
Hoy acudo ante ti como muestra de mi fervor y respeto
Mi querida Yemayá te rezo hoy con devoción,
Diosa de los mares y los océanos,
Tuyos son mis goces y sufrimientos,
Dueña y señora del agua salada y el arrecife,
No hay imposibles ante tu inmenso poder,
Y tu inagotable misericordia se multiplica,
Te imploro comprensión ante mis dudas,
Y paciencia para hacerme entender sobre la tierra
Tú que eres mi madre y la madre del mundo,
Hoy acudo ante ti para rogar tu intercesión,
Te pido me ayudes a resolver el problema que me aqueja,
Protege mi vida con tu santo manto,
Como la más hermosa de la Vírgenes que cubre a su hijo,
Dame la voluntad de seguir adelante y de no rendirme
Y de poder levantarme si me caigo en el camino,
No me dejes vacilar a pesar de las adversidades
Pon tu mano para que yo logre vencer esta causa difícil,
Nadie podrá guiar mis pasos como tú reina africana,
Te ruego no me permitas dar un paso en falso,
Aleja de mi lado a todos aquellos que deseen perjudicarme,
Te ofrezco mi amor y devoción en pago,
Y se con fe que atenderás a mi llamado.
Calma los males que con furia arremeten contra mí y mi familia
Y hazme encontrar en tu regazo la paz que necesito para ser feliz.