Leyendo el Pataki de Oshún y Shangó, siempre viene a mi mente que los Orishas en sus vidas en la tierra, sufrieron y pasaron por las mismas aflicciones y situaciones cotidianas que cada uno de nosotros vive cada día. Me reconforta leer estas historias y entender la gran sabiduría y enseñanza que transmiten.
Este es uno de los patakis (historias) más bonitos de ambas deidades en la religión yoruba, demuestra como en el amor, la humildad y la unión puede llegar la abundancia y la riqueza a tu vida.
Pataki de Oshún y Shangó: La calabaza les trae la suerte
Shangó y Oshún vivían juntos en la pobreza mientras todos los demás Orishas se jactaban de su abundancia y mucha riqueza.
Cada ocho lunas Olofin ofrecía fiestas en su palacio e invitaba a todos a asistir, pero como Oshún y Shangó eran tan pobres no podían ir.
En aquellas fiestas que ofrecía Olofin este era un gran anfitrión y siempre les obsequiaba a todos los Orishas monedas de oro y joyas, pero esta vez decidió regalarle a cada uno de los presentes una calabaza de Castilla.
El día de la fiesta todos fueron donde Olofin, bailaron, disfrutaron, pero se sorprendieron mucho cuando Olofin le ofreció a cada uno su calabaza.
Al ver esto todos los Orishas bajaron de mal humor a la tierra, y decepcionados vieron en el camino a Oshún que andaba mal vestida y le preguntaron ¿tienen para comer tú y tu esposo?, esta contestó que no y decidieron regalarle cada uno sus calabazas.
Las riquezas para Oshún y Shangó.
Oshún y Shangó estaban contentos de alegría pues tenían alimento en su mesa y sentían que una gran abundancia había llegado a sus vidas, dichosos y muy felices llevaron todas las calabazas hacia su casa.
Oshún con gran determinación guiada por la felicidad que la invadía, decidió partir la primera calabaza para hacer dulce, y quedó anonadada al ver que dentro había mucho oro, partió la segunda y así todas las demás, todas estaban llenas de riquezas.
Desde ese momento Oshún y Shangó fueron los más ricos en aquel lugar.
Ofrendas a Oshún para la prosperidad
La siguiente obra es uno de los poderosos rituales para la abundancia dedicado a la Diosa Oshún, se puede hacer a las seis de la mañana o las doce del mediodía.
Productos que necesita para realizar la obra:
- 1 Plato blanco.
- 1 Calabaza.
- Escarcha dorada (purpurina o polvo dorado)
- Un poco de miel de abeja.
- Muchísima fe y amor.
Procedimiento:
- Tome el plato blanco y encima de este pondrá la calabaza, el fruto debe estar entero, sin cortar, en perfecto estado y forma.
- Agregue por encima del fruto escarcha dorada y miel de abeja, de arriba hacia abajo, de forma que el fruto se cubra de miel.
- Cuando esté vertiendo la miel debe decir con mucha fe y de corazón: “Que las riquezas de Oshún fluyan a mí como lluvia cae del cielo y como las aguas del río que se mueven constantemente”.
- Luego coloca el plato en un lugar seguro cerca de la puerta de casa, del negocio o del lugar donde desees atraer principalmente la abundancia.
- Pasados unos días, cuando la calabaza se pudra significará que ha recogido todo lo negativo y ya puede recogerla y tirarla.
Si alguien entra a su casa y ve la obra con la calabaza, lo más probable es que la curiosidad de esta persona le lleve a preguntar qué es, usted dirá que es un adorno que le gustó mucho y por eso lo coloco allí.
Recuerde que todo no se dice, y cuando de riquezas y abundancias hablamos, los demás nos quieren ver bien, pero jamás mejor que ellos, la envidia es silenciosa pero muy poderosa.
Este ritual también sirve como amuleto para protegerse de todo tipo de maldiciones.
Que esta obra te brinde todo aquello que desees de corazón, que la riqueza, la dulzura, el amor y la salud de Madre Oshún te acompañen siempre.