Oshún, orisha del panteón yoruba, que es muy adorada y venerada por sus poderes, gran energía que provee abundancia y fertilidad en la tierra.
Es una diosa amorosa, que brinda sin esperar nada a cambio, prosperidad y amor. De ella recibimos humildad, paciencia y fortaleza para vencer con firmeza los obstáculos de esta vida.
Es dueña de ríos, de aguas dulces, del oro, de la dulce miel y las riquezas del mundo, provee al hombre la dicha y la suerte en el amor, es ella, deidad de sentimientos poderosos, quien nos guía por los senderos más hermosos.
En la Santería o Regla de Osha, Oshún es protectora incansable de sus hijos, es también calamitosa, nunca se sabe cuando está enojada, incluso puede matar riendo, porque como mismo es dulce, es amarga.
Por ello cuando la invoquemos debemos hacerlo desde la paz y el amor, nunca pedir el mal, ni maldecir, debemos ser muy respetuosos.
Poderosa oración de Oshún para abrir caminos y protegernos
Para honrar e invocar a la guerrera dorada de la Osha, podemos colocar una vela amarilla, 5 girasoles, un poco de miel, naranjas, u otras de las ofrendas que adora la diosa.
- Al final del artículo dejamos algunos rituales en su nombre, o puede ver las ofrendas a Oshún haciendo clic aquí.
Recuerda que en esta oración de la diosa Oshún debes poner mucha fe, y como a una madre hablarle de corazón, agradecerle sus bendiciones y con mucho amor hacerle su petición.
Diosa Oshún, dama dorada con piel de oro, benditas son tus aguas que lavan mi ser y me liberan del mal.
Oshún, divina reina, hermosa orisha, ven a mí, caminando en la luna llena, trayendo en tus manos los lirios del amor de la paz.
Hazme dulce, suave y seductora como eres.
¡Oh! Madre Oshún, protégeme, haz que el amor sea una constante en mi vida, y que pueda amar toda la creación de Olorun.
Protégeme de toda brujería y hechicería.
Dame el néctar de tu dulzura y que consiga todo lo que quiero: la serenidad para actuar de forma consciente y equilibrada.
Que yo sea como sus frescas aguas que siguen senderos a lo largo de los ríos, cortando rocas y precipitándose por las cascadas, sin detenerme ni tener camino de regreso, solo siguiendo mi camino.
Purifica mi alma y mi cuerpo con tus lágrimas de aliento.
Inúndame con tu belleza, tu bondad y tu amor, llenando mi vida de prosperidad. ¡Gracias mi reina Oshún!