Bella Representación a Inle en su día: Dedícale este Rezo

Hoy celebramos el día de Inle, un orisha de la sanación y la medicina en la tradición yoruba.

Se le sincretiza con San Rafael Arcángel en la religión católica, quien también es considerado un sanador y protector de la salud. Ambos comparten la esencia de la curación y la protección, guiando a aquellos que buscan sanar tanto física como espiritualmente, por ello los veneramos juntos en la santería.

En este día especial, podemos honrarlo encendiendo una vela de color verde, su tonalidad representativa. A través de nuestra gratitud y peticiones sinceras, podemos pedirle protección y sanación para nosotros y nuestros seres queridos.

Que la luz de esta vela ilumine nuestros caminos y nos brinde la curación que necesitamos en cuerpo, mente y espíritu. Que Inle nos guíe y proteja en todo momento.

Oración a Inle por Protección y Armonía Familiar

Enfrentando los Peligros con Fe

Mi orisha Inle, protector y sanador de almas inquietas, hoy te agradezco por el regalo del presente, donde cada momento es una oportunidad para crecer y aprender. Gracias por el día que tengo ante mí.

En estos momentos de gratitud te doy las gracias, y también me acerco a ti con un corazón cargado de temores y frustraciones. Siento la presencia de peligros acechando y energías negativas rodeándome, creando una sombra que oscurece mi camino. En esta hora de necesidad, te imploro, Inle, que extiendas tus manos de luz y me protejas. Que tu escudo divino aleje los males que intentan penetrar mi espacio y perturbar mi paz.

En tu gracia y sabiduría, encuentro consuelo para las dolencias de mi alma y las preocupaciones de mi corazón. Te ruego, oh gran Inle, que guíes mis pasos hacia la seguridad y la serenidad. Ayúdame a superar los obstáculos que encuentro y a transformar las energías negativas en fuerzas positivas que me impulsen hacia adelante.

Además, te pido por mi familia, ese sagrado lazo que nos une. En tus manos confío la armonía y el bienestar de los seres que amo. Que tus bendiciones caigan sobre ellos como lluvia dulce y revitalizante, protegiéndolos de cualquier daño y fortaleciendo nuestros vínculos familiares. Que en nuestra unidad encontremos fuerza para superar cualquier adversidad y amor para nutrirnos mutuamente.

En este momento de fe, me entrego a ti, Inle, con fe y humildad. Sé que tu poder es infinito y tu amor es incondicional. Que esta oración llegue a ti como un susurro del alma, y que tu respuesta se manifieste en nuestra vida cotidiana, trayendo consigo la paz, la protección y la alegría que tanto necesitamos.

Con gratitud y esperanza, me despido, confiando en tu bondad eterna.

Así sea, ashé.