El Vudú o Vodú como también se conoce, tuvo su cuna en el Occidente de África, se considera entre las religiones más antiguas del mundo, proviene etimológicamente del vocablo en francés Voudou que significa espíritu, siendo precisamente el culto a este el corazón que da vida y nutre a esta práctica religiosa.
¿Cómo se instauró está doctrina en América?
El proceso de conquista y colonización que se llevó acabo en Las Américas por parte de la corona española trajo consigo la confluencia de múltiples religiones en un mismo continente, tradiciones que con el pasar de los años se enraizaron y dieron como fruto un rico patrimonio cultural.
Estados Unidos, Togo, Benín, Haití y Cuba son de los países en que con mayor frecuencia se desarrollan estas prácticas.
Los conocimientos vudús llegan a nuestro continente por parte de los africanos quienes fueron traídos a la fuerza como esclavos para realizar trabajos forzosos, siendo indudablemente los colonos y capataces los primeros en sufrir en carne propia los maleficios de estos sortilegios.
Lo que no conocías sobre la religión Vudú
Dentro de las deidades principales de este culto encontramos a Bondye o Mawu, estas omnipotencias celestiales no interactúan directamente con los humanos, se comunican con estos a través de las loas los cuales son entidades sobrenaturales que actúan mediando como enlace entre el cielo y la tierra.
El folclore popular atribuye a esta religión el poder de resucitar a los muertos y hacerlos trabajar en beneficio del brujo que los hizo regresar del otro mundo, así como la creencia de causar la muerte a voluntad.
El muñeco Vudú ¿Para qué sirve?
Este polémico muñeco no es más que la representación física de una persona sobre la que se desea lanzar un embrujo, es un fetiche el hecho de poder infringir dolor o manipular a la víctima a través de este monigote con forma humana.
Para su elaboración se requieren materiales que estén conectados espiritualmente con el individuo al que se le va a lanzar el conjuro, ya que de esto depende el noventa por ciento de la efectividad del mismo, el otro diez por ciento se encuentra relacionado con los rituales mágicos y las invocaciones que corren a cargo del brujo.
La representación en el arte de sus tradiciones
La literatura recoge los rituales y poderes de esta religión en la novela El reino de este mundo donde el destacado escritor cubano Alejo Carpentier busca reflejar lo real y maravilloso.
Esta religión ha tenido gran repercusión en el cine teniendo escenarios en Nueva Orleans en lugares tan emblemáticos como el Barrio francés, donde es muy común ver la mágica efectividad de los muñecos vudús que son frecuentemente inmolados con agujas y demás objetos penetrantes.
La religión vudú como parte de las antiguas civilizaciones no ofrece al juicio popular todas sus prácticas ceremoniales, se guarda para sí la fe del secreto y la conservación de sus rituales según mandan los ancestros y la tradición.