Otura Meyi: El odun del remero que nos enseña a ser humildes en la vida

En la ciudad de Dacca vivió hace muchos años un remero, el hombre de constitución robusta infundía respeto con tan solo mirarlo, pero a pesar de las apariencias este era un hombre de corazón noble y pensamiento certero.

Pataki donde Elegguá y Shangó bendicen al remero por su ayuda y desinterés

Un día mientras preparaba todo para partir hacia su trabajo recibió una visita de Elegguá y Shangó, quienes regresaban exhaustos de una campaña que habían ido a realizar a muchos kilómetros de la ciudad.

Los Orishas comunicaron al remero que:

Su presencia allí no perseguía otro objetivo que el hacer el bien al necesitado y de esta forma tornar más llevadera la vida de los seres humanos que honraban las doctrinas de la Religión Yoruba.
Pero que lo visitaban para pedirle de favor que los cruzara en su barco hacia la otra tierra que era interrumpida por el mar, para continuar desarrollando su campaña.

El remero con gusto condujo a los Orishas a su modesta embarcación y al cabo de unos minutos ya los conducía hacia un destino seguro.

Antes de tocar tierra, Elegguá y Shangó extendieron su súplica hacia Olofin pidiendo que bendijera al remero que con tanto desinterés y cautela los había ayudado.

Deseando para él que el Orisha lo dotase de salud y fuerzas para que pudiese continuar desempeñando honradamente su oficio.

Consejos de Ifá en Otura Meyi

Otura Meyi es un signo muy preciso que enaltece la necesidad de tener un trabajo honrado para salir adelante en la vida, por ser esta una fuente de ingresos digna.

Esta letra habla sobre la importancia de la constancia para lograr lo que se desea obtener y la disciplina que se requiere para alcanzar los sueños.

Vivir desde la humildad y respetando a los Orishas…

Bajo este odun la persona debe ser digna y no mostrarse corrupta ni interesada hacia sus semejantes, ya que en la humildad y el desinterés radican los ireses de este signo.

Donde también debe venerase la acción de Shangó y Elegguá como santos, pero también como protecciones, que marcarán una pauta a seguir en la vida del individuo guiándolo por el camino correcto.

Es necesario conocer que la persona que se rija bajo este odun debe respeto a Yemayá, quien es la dueña del mar y madre de todos los humanos, pues mediante esta le llegarán muchas suertes y bendiciones.

Siendo la palabra de los Orishas la única que logrará que Olofin acceda a los favores que el devoto necesite, siempre y cuando los merezca.