La cremación es una práctica funeraria que consiste en la incineración del cadáver hasta convertirlo en cenizas y así garantizar la voluntad de los que prefieren ser sepultados de esta forma, respetando la creencia religiosa de cada cual y los conceptos de higiene, facilidad de trámites vinculados a la exhumación de los restos y el tiempo invertido en dichos procesos.
¿Por qué las personas optan por la cremación?
Algunos aseguran en vida querer ser sometidos a este proceso luego de fallecer por poseer ciertos temores asociados a la fobia de despertar una vez han sido sepultados, llamada tapefobia.
Otros afirman sentir escalofríos de solo pensar en la descomposición natural del cuerpo inerte, mientras que los demás se plantean la necesidad de hacerlo por sentir miedo a ser ultrajados o sencillamente por no poseer un panteón propio para enterrar a sus muertos.
La posición de la Iglesia ante la cremación.
La Iglesia Católica no se ha pronunciado abiertamente respecto a la negación de la cremación, aunque esta es una posibilidad que no rechazan sus seguidores, quienes para ejecutar este rito funerario se apoyan en la frase bíblica:
Del polvo vienes y al polvo regresará
Mientras que otros rechazan esta práctica por considerarla similar a sufrir la tortura de la asistencia metafórica al infierno, debido a la presencia del calor y las llamas.
¿Los Santeros pueden incinerar sus restos?
La práctica de la Santería en Cuba y demás vertientes de las corrientes africanas sobre la isla antillana rechazan de forma abierta la cremación del cadáver, alegando la necesidad de realizar al fallecido un número secreto y determinado de ceremonias que requieren la presencia del cuerpo del difunto.
Por otra parte, santeros mayores y menores aseguran poseer la convicción de que el hecho de reducir su cuerpo a cenizas borrará su identidad espiritual y sesgará la posibilidad de reencontrarse con los suyos en un mundo más feliz.
La Muerte de un Santero se debe respetar según los preceptos de la religión
Es válido mencionar que en diversas corrientes yorubas se asocia a la muerte como una evolución del alma hacia otro plano superior en el que se necesita la presencia de santa sepultura y restos mortales para ser reconocidos por las deidades.
Sirviendo esto como vínculo entre el difunto y sus familiares, realidad que de una forma u otra lo mantendrán alejado del olvido.
Existen otras teorías que relacionan la reencarnación del alma, siempre y cuando hayan dejado íntegra su materia terrestre inerte.
Siempre y cuando esta haya sido debidamente despedida, el alma se elevará y comenzará a preparase para su posterior regreso al plano terrestre.