La atención a los espíritus de los difuntos, es uno de los principales elementos de la religión afrocubana.
El culto y devoción a los antepasados nos ayuda a establecer el equilibrio y el bienestar en el plano terrenal. A ellos, se le solicita su apoyo para mantener una existencia pacífica y segura.
La atención a los Egguns o espíritus de los muertos, surgió como elemento sincrético en tiempos de la colonia, devenido de las misas espiritistas de la época.
Así, uno de los elementos de consagración de la religión afrocubana es la Teja de Eggun.
¿Cómo es la Teja de Eggún?
Este objeto poseedor de grandes misterios espirituales, es en sí una teja de barro con signos sagrados de Ifá preparada por un Babalawo, a partir de los cuales se invoca a los Egguns (muertos, antepasados y ancestros).
La teja siempre debe llevar a su lado un Pagugú, bastón que simboliza a Egguns y va cargado dentro, con el cual se envían mensajes a los muertos.
El rincón dedicado a Egguns es sagrado, por tanto, no se le puede dedicar cualquier espacio, la teja se debe colocar en el exterior de la casa, solo cuando la persona no tiene un lugar adecuado para colocarla podría ponerse en el interior de esta, por ejemplo, debajo de un fregadero.
El rincón del muerto: significación y poderes
La Teja de Eggun, también conocida como el «El rincón del muerto» es un receptáculo de poder donde convergen las energías de los antepasados.
Ella permite darles atención a los difuntos y mantener con ellos una comunicación adecuada mediante la atención, oraciones, ofrendas y sacrificios.
Este elemento, propiciará un enlace entre el plano terrenal y el espiritual para mantener la armonía y que los Egguns presten su ayuda ante las difíciles situaciones de la vida.
En la Teja de Eggun todo practicante de la religión yoruba les rinde culto a los ancestros y les venera de forma sistemática y permanente.
Teja de Eggun, primero la atención a los difuntos
Tan fuerte es el papel de la atención a los difuntos en la Regla de Ocha, que la teja de eggun es el más importante elemento de consagración para todo yoruba.
Dentro de la religión tenemos un dicho que dice: “Iku Lobi Osha” o “El Muerto pare al Santo”, que implica que primero está la atención a los muertos y después a los Orishas.