A la Siguaraya le cantaba el gran Benny Moré: “En mi Cuba nace una mata
que sin permiso no se puede tumbar”.
Y es que la Siguaraya es uno de los árboles sagrados de las religiones afrocubanas, no solo de los yorubas, sino de otras expresiones religiosas que tienen cabida a lo largo y ancho de nuestra Isla como la Regla de Palo Monte o los Abakuá.
Es un bello árbol de los parajes cubanos, famoso por su madera y su belleza florecida. Se dice que del néctar de sus flores las abejas producen una miel intensa sin igual en el mundo entero.
A la siguaraya o Trichilia havanensis se le conoce con otros nombres diversos como atori, rompe camino, tapa camino y abre camino, todos haciendo alusión a su poder vencedor para enfrentar dificultades.
Crece silvestre y fuerte en los campos de la Isla, y puede llegar a alcanzar hasta 10 metros de altura.
Usos medicinales y espirituales de la Siguaraya
La Siguaraya tiene importantes usos medicinales, pues se utiliza para las afecciones artríticas, del aparato urinario e incluso como purgante en el tratamiento de enfermedades venéreas.
Es fuente de atributos religiosos para la cultura afrocubana en general y esconde un gran significado espiritual, esta planta es capaz de destruir obstáculos, oscuridades, desbarata lo malo y elimina enemigos.
Como mencionábamos antes, es tan poderosa que en las religiosas afrocubanas es poseedora de secretos milagrosos y es conocida como:
- “Rompe camino” porque destruye al adversario;
- “tapa camino”, evita que los enemigos interfieran en nuestra vida y
- “abre camino” porque elimina lo malo y permite que entre lo bueno.
La Siguaraya en la Santería, honor a las 7 potencias
En la Regla de Osha (santería) la Siguaraya es también una planta sagrada, contiene la energía y el poder de los siete Orishas principales de la religión Yoruba, las «Siete Potencias Africanas«:
- Yemayá la diosa de los mares,
- Elegguá el dueño de los caminos,
- Ochún la reina de las aguas dulces,
- Obatalá el padre de todos,
- Orula el sabio, consejero y adivino,
- Oggún el dueño del monte y el hierro y
- Shangó el Rey del tambor y del rayo.
Sus poderes son capaces de brindar nuevas oportunidades a aquellos que requieran la ayuda de las siete potencias Africanas.
La Siguaraya, es conocida también como Siete Rayos, en referencia a Changó, Dios del rayo y el trueno, a quien también le pertenece este árbol, que hace de ella su casa y desde su copa vigila a sus hijos.
Esta planta es sumamente respetada por todos los santeros y acoge rituales y ceremonias dedicadas a Shangó y a las 7 potencias del panteón yoruba, se venera, se respeta y todos conocen que es un elemento sagrado para el culto a los Orishas.