Saltar al contenido

Con ayuda de Elegguá, Orula consiguió la mano de Oshún

Oshún y Orula

En muchas leyendas van unidos la diosa del Amor y los Ríos, Oshún y el Gran Adivino Orisha, Orula. Y es ese gran vínculo el que ha creado hermosos patakíes que muestran su afinidad.

Oshún, Osha de cabecera, representa la intensidad de los sentimientos y la espiritualidad, la sensualidad humana, el amor y la feminidad. Orisha justa y valiente, muchas veces se le ve junto a Shangó el Dios del trueno, o con sus hermanas Yemayá, la dueña del mar y Oyá, la señora de la centella, y otras tantas junto al sabio Orula, siempre demostrando su belleza y su carácter sensual y enérgico.

Así, la vio un día Orula, el gran adivino yoruba, y quiso hacerla para siempre su esposa.

Patakí del amor entre Oshún y Orula

Cuenta la leyenda yoruba que era ella la muchacha más linda de la región. Y versa el patakí que a su casa acudían por centenares los pretendientes a pedir su mano en matrimonio, por su inmensa belleza y su sensualidad.

Pero la madre de la joven quería darla en matrimonio al que demostrara ser más astuto que lo demás. Por ello les dijo un día a los pretendientes que visitaban la casa:

“Mi hija tiene un nombre secreto que nadie conoce. El que lo sepa, será su esposo.”

Orula u Orunmila, como también es llamado el adivino, se encontraba entre los enamorados de la hermosa muchacha, pero a pesar de consultar con los oráculos, no logró saber su nombre.

Decidió entonces pedirle ayuda a Eleguá, el travieso dueño de los caminos y este le dijo que, con su habilidad, podría descubrirlo sin problemas.

Así Elegguá se acercó a Oshún disfrazado de niño, de anciano o haciéndose el dormido con tal de descubrir aquel secreto. Así esperó pacientemente a que alguien dijera el nombre de la hermosa joven.

Eleguá descubre el nombre de Oshún

Tras varios días de espera, Elegguá escuchó un día que la madre de la muchacha, que nunca decía el nombre en voz alta, lo olvidó y la llamó “Oshún”.

Rápidamente se lo comunicó a Orula, que se había convertido ya en un babalawo muy respetado. Este le agradeció a Elegguá su ayuda y acudió rápidamente a la casa de la joven.

Al verla le dijo “te llamas Oshún” y así logró obtener su mano en matrimonio. Con paciencia, astucia y la ayuda del poderoso Eleguá que siempre abre los caminos hacia aquello que deseamos de corazón.

Las leyendas yorubas nos regalan muchas enseñanzas sobre los orishas, siempre brindándonos consejos y sabiduría para tomar las mejores decisiones.

Contenidos más leídos:

error:
Enviar este mensaje
Hola, quiero desbloquear mi camino.

¿Puede enviarme la información y el precio para una cita con ustedes?

Gracias