Saltar al contenido

¿Qué son los tambores Batá en la Santería? Invocando a los Orishas

Tambor santería

Desde el inicio de los tiempos, la música se ha asociado a un lenguaje por medio del cual se expresa y comunican ideas, sentimientos y emociones. Los ritmos han evolucionado y reflejan maneras de pensar, cualidades, locaciones e incluso religiones.

Y así pasa con ese ancestral ritmo procedente de los tambores batá, que tienen forma de reloj de arena, una familia de tres y sus nombres de mayor a menor son:

  • Iyá (tambor Parlante),
  • Itótele (medio) y
  • Okónkolo (Pequeño).

Los tambores batá establecen un lenguaje y un sistema de comunicación, que puede reflejar similitudes entre las palabras humanas y los ritmos que producen. Cada uno de los tres tambores posee una función especial en el «toque divino» de invocación a las deidades.

Tambores Batá, instrumento de comunicación divina

Los tambores batá, producen toques propios y diferentes, tomando en cuenta las características de cada Orisha y de las ceremonias para las cuales son utilizados.

Ellos son expresión de simbolismo dentro de la nación lucumí en África, los tambores son en sí mediadores e interlocutores del lenguaje entre humanos y deidades, respondiendo al misticismo propio del culto yoruba.

Estos instrumentos sagrados han sido utilizados por cientos de años en las ceremonias yorubas, su ritmo y significado espiritual y religioso ha perdurado en el tiempo para quedarse dentro de la religión afrocubana.

Hoy, su historia está ligada a la Regla de Osha (Santería) y sus ritos religiosos e imitan el lenguaje para establecer una comunicación entre los hombres en la tierra y los Orishas.

Un lenguaje directo de la tierra al cielo, porque como dicen los mayores, los tambores batá no se tocan “hablan”.

“Toques” a los Dioses, un lenguaje de fe

Los toques de los tambores Batá llaman e invocan a los dioses y por ello los distintos ritmos tienen una significación particular dentro del ritual de santería.

No todos pueden tocar los tambores, sino que aquellos encargados de arrancarles ritmos, tienen amplios conocimientos del tema musical y de la religión yoruba, la religiosidad y espiritualidad que poseen los bataleros se desprende de ellos para establecer una conexión única y especial.

Y es que, desde antaño, los africanos afirmaban que los toques de tambor son verdaderas conversaciones entre los instrumentistas y los dioses, un legado hermoso que regalaron a nuestra cultura.

Los tambores batá, además, deben construirse con ciertos materiales y se afinan los parches con cuidado, su confección es especial y deben ser consagrados correctamente.

Además, los tres instrumentos se tocan siempre en conjunto, porque son una familia inseparable de tambores, que juntos en un solo ritmo invocan, agradecen y traen a los orishas a la tierra.

Contenidos más leídos:

error:
Enviar este mensaje
📖 Hola, quiero desbloquear mi camino.

¿Puede enviarme la información y el precio para una cita con ustedes?

Gracias