Maferefún la Bóveda Espiritual: Soy hija de Eggun

Soy hija de Eggun y no lo sabía, desde pequeña tuve sueños que no comprendía, pero soy hija de Eggun y este me guió hasta el sendero en el que hoy camino.

Creo en los espíritus con todas mis fuerzas, pues cuando creí que fracasaría, cuando mi cielo se hizo gris y supe lo que era la desesperación, Eggun estuvo a mi lado, no me dejó caer y me dio mil pruebas a través de las cuales supe que nunca estaría sola y que siguiendo sus consejos con perseverancia lograría mis propósitos.

Es fácil tener fe cuando todo va bien, cuando no existen tropiezos, pero la verdadera devoción se encuentra en la adversidad, cuando la vida te pone entre la espada y la pared y no tienes más que aferrarte a lo que te dicta tu corazón.

En esta vida los espíritus son mi guía…

Soy hija de Eggun porque creo en el espiritismo, en la vida más allá de la muerte, porque sé que los espíritus llegaron a mi vida con la misión de orientarme y guiarme, con el fin de mi salvación y la de mi familia.

Soy hija de Eggun porque a lo largo de mi vida he visto y he hecho los cambios que los espíritus deseaban para mí y he logrado a través de esto evolucionar y crecer como persona, porque he experimentado la bondad, la fe inquebrantable y el amor verdadero.

He experimentado las premoniciones, las corrientes de energía y el poder de la albahaca y la oración.

Soy hija de Eggun porque asumí cada advertencia mirando el lado positivo y sabiendo que por espesa y oscura que sea la selva que debo atravesar, mis espíritus no me abandonarán e irán guiando mis pasos.

A ellos les debo y les agradezco todo y solo podré pagarles con fe, amor y disciplina.

Soy hija de Eggun y ni aunque vuelva a nacer, deseo olvidar mis creencias, mis raíces, mi identidad, encuentro en la energía de mi cuadro espiritual la fuerza, la alegría y la voluntad de seguir luchando por mis sueños.

Respeto a mis ancestros, por eso hago un llamado en su honor antes de realizar consagraciones, busco la licencia y la bendición de mis espíritus para poner bendiciones en las vidas que toco, para que el caos no se adueñe de mi ilé y no vengan a mi vida las perturbaciones.

Soy hija de Eggun y al mundo espiritual me debo, el desarrollo espiritual es el camino para comprender muchos de los secretos de la vida y del destino, luz y progreso para los buenos seres.