5 Muestras de FE que podemos ofrecer a Santa Bárbara en su Víspera

La santa milagrosa, la protectora de los cubanos, celebra su día el 4 de Diciembre, en sincretismo con el Orisha del Trueno, el guerrero Shangó.

Ambos son de las deidades más veneradas en Cuba, a quienes le piden protección contra los enemigos y las injusticias y ayuda para superar obstáculos y situaciones difíciles.

La festividad de Santa Bárbara es el 4 de diciembre en todo el mundo. Fundamentalmente se celebra en España y en muchos países de América el día de la santa protectora, en el que las personas visten de su color, el rojo, y acuden a numerosos santuarios a adorarla y pedir sus bendiciones.

El Día de Santa Bárbara en Cuba, sus devotos llegan al Santuario Nacional dedicado a la santa, ubicado en el barrio de Párraga, en el municipio de Arroyo Naranjo, llevando flores y velas para agasajarla.

Pero son muchos los que la veneran en sus casas con una imagen o un altar personal. Allí le entregan ofrendas, le encienden velas y le piden sus bendiciones.

¿Cómo festejar a Santa Bárbara y esperar su día?

Existen formas sencillas de venerar a Santa Bárbara, siempre teniendo en cuenta que se le debe celebrar con mucha fe y mostrándole todo nuestro amor.

Además, gusta que sus devotos sean fuertes de espíritu y luchadores, para así apoyarlos hasta que consigan lo que se proponen.

Veamos algunas muestras de fe como forma de devoción que la Santa disfruta en su día:

1. Rosas rojas para la Santa

La flor preferida de Santa Bárbara es la rosa roja, no solo porque muestra su color predilecto y el que la simboliza, sino porque también representa la pasión y la fuerza de carácter que tienen como cualidades principales sus hijos y devotos.

2. Ofrecer Velas rojas o blancas

Para rezarle a Santa Bárbara siempre es bueno encenderle velas blancas o rojas. El blanco es el tono dedicado a todos los santos y el rojo es su color representativo.

La vela le dará luz y aprovisionará el ambiente para rezarle y agradecerle.

3. Preparar un Altar sencillo dedicado a Santa Bárbara

Podemos dedicarle a Santa Bárbara un altar sencillo en casa, usualmente decorado con flores y velas rojas.

Allí colocamos su representación en estatua o imagen y a sus pies podemos ofrendarle manzanas rojas, sus favoritas y llenarlo con rosas y velas rojas. También podemos adornar el altar con elementos de su color, y añadir una copa de vino tinto.

Puedes poner dulces o hacer con tus propias manos algunos en la casa, como dulce de harina o torrejas. Cuatro ruedas de pan con un poco de vino, azúcar y empanadas con huevo y harina, serán geniales.

También puedes ponerle Incienso, para aromatizar el ambiente y así alejas toda energía negativa y atraes las positivas.

4. Agradecer las bendiciones recibidas

Como Santa Bárbara valora el espíritu valiente y luchador en sus devotos, también gusta que estos sean agradecidos, por lo que debemos reservar siempre un tiempo en su Día, para rezarle y agradecerle sus bendiciones, en un rincón tranquilo donde podamos hablarle y dedicarle nuestras oraciones.

5. Rezos a la Santa de todos

Los rezos a la Santa son parte importante de los festejos en su día. Podemos dedicarle disímiles oraciones, siempre pidiéndole que nos guíe y nos proteja y agradeciéndole todas sus gracias.

Oración a Santa Bárbara pidiendo su bendición y protección:

Veamos un ejemplo de plegaria a la Santa:

Santa Bárbara, virgen bendita, grandiosa de inmenso poder, Dios te acompañe, y tú a mí por el camino del bien.
Con tu espada vencedora líbrame del mal, de la injusticia, de la envidia y de los malos ojos.
Con el poder del rayo protégeme de mis enemigos, glorifica la boca de fuego de mi cañón y permite que salga victorioso.
Con el cáliz de tu copa y el vino mantén la fuerza de mi cuerpo y espíritu para la dura lucha y el combate.
A mis manzanas y margaritas recíbelas como ofrenda de que te tengo siempre presente en mi pensamiento y en mi hogar, y te ruego no me abandones nunca y acudas a mi cada vez que te reclame para defender mi fe, mi tierra, mi familia y mis luchas; y que al final me lleves siempre a la gloria como tú.
Amén.