Al Orisha Oggún le rezan los luchadores y los valientes, aquellos que no temen sacrificar su vida por una causa justa…los impulsivos, los poderosos, los líderes por naturaleza, tienen su representación en esa deidad yoruba.
Él simboliza los comienzos, el principio, la mañana, la primavera, y también los poderes de mando, la fuerza, la violencia, el impulso, la autoridad, la virilidad y la juventud.
Presentamos ahora, 5 de las cualidades y gustos de Oggún, el gran guerrero:
1. Los metales
Oggún es el Orisha patrón de los herreros, de las guerras, de la tecnología, de los cirujanos del ejército y de todo aquel que trabaje con los metales.
Así, tiene el poder todo tipo de metal y es el dueño de los caminos, así como de los montes, es además un mensajero directo de Obbatalá y se caracteriza por tener un carácter fuerte y violento, tan poderoso y difícil de doblegar como el elemento que representa.
2. Atributos de hierro
El receptáculo de Oggún es un caldero de hierro de tres patas y lleva una otá (piedra) recogida en el monte o en las vías del tren.
También sus atributos son de metal, como las herraduras, los clavos de línea, un trozo de vía de tren, freno de caballo, espadas, picos, palas, machete, masa, el conjunto de yunque y martillo, herramientas de trabajo en general, cadenas, revólveres, rifle, cuchillos, achabbá (cadena con 21 piezas), sombrero de guano, mariwó (pencas de palma secas), lanzas, imán entre otros.
A Oggún le gusta blandir con su machete todo a su paso, es el símbolo que lo representa, herramienta con la que se enfrenta a todos y cada uno de sus enemigos, pero que también utiliza para abrirse paso en una selva o en un monte.
3. La justicia
Es el segundo Orisha en la Regla Ocha, detrás de su hermano Eleguá, pues cuando este abre caminos, Oggún es el guerrero encargado de proteger a los devotos que los eligen.
Es él quien se encarga de tomar justicia por sus propias manos, con un fuerte carácter y un gran despliegue de violencia hacia sus enemigos.
4. Ofrendas para agasajarlo
Al guerrero yoruba, se le puede dar en ofrecimiento carneros, chivos, pollos, gallos, caracoles de tierra, así como los de mar.
Se dice que cualquier animal que sea sacrificado para él es aceptado de buena gana y así se los presentan sus devotos, para agradecerle por sus bendiciones y su protección.
También se le ofrece a esta deidad la miel, el pescado ahumado, la manteca de corojo, el maíz tostado y licor.
Sus ewes (hierbas) son el aguacate, algarrobo, almácigo, almendra, atiponlá, lengua de vaca, pata de gallina, Ceiba, mora, hierba de la sangre, adormidera, albahaca, aroma, rompesaragüey, romerillo, cardo santo, jengibre, granada, pendejera, peonía, tabaco, siempre viva, entre otras.
5. Atención de sus devotos
Oggún aprecia la devoción de sus hijos, a esta deidad se le debe atender los lunes. Para ello se le sopla aguardiente o ron y humo de tabaco, se les vierte encima miel, y se le rocía por encima maíz tostado, jutía ahumada y pescado ahumado.
No hay que arrodillarse ante él, solo se enciende una vela para que nos ayude en nuestras necesidades y problemáticas.
A él se le pide fortaleza para seguir adelante, mejoras en el trabajo y la consecución de victorias y metas trazadas entre otros.