Naná Burukú es una Orisha mayor de la religión yoruba, reconocida por sus poderosos dones y su inmensa sabiduría.
También conocida como Naná Burukú es la sabia abuela Orisha que representa la fortaleza y el conocimiento ancestral. Se cuenta que es muy antigua y que como tal, exige respeto de parte de sus devotos.
¿Quién es Nana Burukú en la Santería?
A esta deidad se le atribuye inmensa espiritualidad, y los yorubas la consideran Madre de Dios y Abuela de todos los Obatalá.
Es mediadora entre la vida y la muerte, pues Naná es una antigua fuerza poderosa que va sobre todo en la cabeza del creyente. Se dice que ya existía antes de la llegada de Oduduwá a Ilé Ifé y su alimento es el espíritu de los seres.
Naná tiene características masculinas y femeninas. Ella rige en la naturaleza en la energía poderosa de los ojos de agua, las desembocaduras de los ríos, los pantanos y en las lagunas.
El culto de origen arará la considera como Madre de Babalú Ayé o San Lázaro los patronos de las enfermedades, o incluso uno de sus caminos.
Muchos son los babalawos que advierten sobre Naná Burukú, diciendo que es una deidad misteriosa y terrible si se le provoca, y habita en forma de majá, en ríos, manantiales y cañas bravas. Por ello, se le invoca en ojos de agua, lagunas, pocetas y ríos y se dice que baja vestida con la piel del majá.
Sus atributos son un cuchillo de caña brava, un majá enroscado alrededor de la tinaja, un estómago de metal y su elemento de poder el Ibirí (ramo de hojas de palma o paja de la costa curvados con adornos).
Sincretismo de Naná Burukú
Y como parte del proceso de transculturación provocado por la etapa esclavista, muchos de los Orishas se sincretizaron con los santos católicos, pues los colonialistas les prohibieron a los esclavos practicar su religión y decidieron ocultarla.
Y así Naná Burukú sincretiza con:
- Santa Ana
- Virgen del Camino
Santa Ana, Patrona de las embarazadas
A Santa Ana o Ana, se le considera madre de la Virgen María, y por tanto la abuela de Jesús de Nazaret.
Su culto deviene de los evangelios apócrifos, que contienen algunos datos de documentos históricos y cuentan que en Nazaret vivía Ana junto a su esposo Joaquín, entristecidos por no haber podido tener hijos.
Se dice que Ana clamaba al Señor pidiéndole que retirase de ella la maldición de la esterilidad y que, si tenía la dicha de tener un hijo, este se dedicaría por entero a Su servicio.
Entonces un ángel se les apareció y les dijo que sus ruegos habían sido escuchados. Luego, Ana dio a luz a una hija a la que llamaron Miriam (María).
La veneración a Santa Ana como madre de la Santa Virgen María, se remonta al siglo IV. Fue en 1382, que Urbano VI publicó el primer decreto pontificio referente a Santa Ana, concediendo la celebración de la fiesta de la santa a los obispos de Inglaterra exclusivamente. Los festejos se extendieron a toda la Iglesia de Occidente en 1584.
Hoy en día el culto a Santa Ana se ha extendido a nivel mundial y es la virgen representativa de numerosas ciudades del mundo. En la actualidad cientos de ciudades y pueblos la tienen como patrona. Por ejemplo, es la principal patrona de la provincia de Quebec en Canadá y de Cuenca, Burgos, Asturias y Tenerife en España.
Y con la extensión del culto católico a América, también la veneración a Santa Ana creció en esta parte del mundo, distinguiéndose Estados Unidos, Puerto Rico, Cuba, El Salvador y México.
A Santa Ana le rezan muchos por el bienestar de sus hijos y familiares. Es considerada como la patrona contra la pobreza, y protectora de los carpinteros, las personas sin hijos, caseros, amas de casa, abuelas, trabajadores del cordón, artículos perdidos, mineros, madres, mujeres embarazadas, el pueblo indio, costureras y mujeres trabajadoras.
Oración a Santa Ana para pedir por los hijos:
- Proponemos a continuación, una oración para pedirle a Santa Ana su bendición para nuestros hijos:
Gloriosa Santa Ana, Patrona de las familias cristianas, a Ti encomiendo mis hijos. Sé que los he recibido de Dios y que a Dios les pertenecen por tanto te ruego me concedas la gracia de aceptar lo que su Divina Providencia disponga para ellos.
Bendíceles oh Misericordiosa Santa Ana, y tómalos bajo tu protección. No te pido para ellos privilegios excepcionales; sólo quiero consagrarte sus almas y sus cuerpos, para que preserves ambos de todo mal. A Ti confío sus necesidades temporales y su salvación eterna.
Imprime a sus corazones, mi buena Santa Ana, horror al pecado; apártales del vicio; presérvales de la corrupción; conserva en su alma la fe, la rectitud y los sentimientos cristianos; y enséñales, como enseñaste a Tu Purísima Hija la Inmaculada Virgen María, a amar a Dios sobre todas las cosas.
Santa Ana, Tú que fuiste Espejo de Paciencia, concédeme la virtud de sufrir con paciencia y amor las dificultades que se me presenten en la educación de mis hijos. Para ellos y para mí, pido Tu bendición, oh Bondadosa Madre Celestial.
Que siempre te honremos, como a Jesús y María; que vivamos conforme a la voluntad de Dios; y que después de esta vida hallemos la bienaventuranza en la otra, reuniéndonos Contigo en la gloria para toda la eternidad.
Así sea.
Virgen del Camino, protectora de las carreteras
La Virgen del Camino, conocida como la protectora de las carreteras, es una advocación mariana de España y patrona de la región de León y de la ciudad de Pamplona. La Virgen del Camino, forma parte del Camino de Santiago Francés y es centro de una importante romería en honor a San Froilán.
La Santa Sede nombró a La Virgen del Camino patrona de la Región de León desde 1914 y en 1961 se inauguró allí una Basílica en honor a la virgen, perteneciente a la orden de los Dominicos encomendados por el obispo de León, Luis Almarcha.
Y es que cuenta la leyenda que la Virgen María se le apareció a un pastor llamado Alvar Simón Fernández y le encomendó que avisara al obispo para que allí colocara su imagen.
Se dice que la Soberana Señora cogió una piedra pequeña, la colocó en la honda del pastor y la arrojó. Seguidamente le dijo al pastor que el obispo le creería, pues encontraría la piedra tan grande, que sería señal suficiente de ella lo enviaba y de que era su voluntad y la de su Hijo que se colocara la imagen.
A raíz de esta leyenda, el Papa Pío X cambió el anterior título de Patrona de León de la Virgen del Camino, por el de Patrona Principal de la Región de León.
Igualmente, el Papa Benedicto XV concedió que pudiera ser coronada canónicamente en 1930 y durante la Guerra Civil Española, el 19 de mayo de 1938, se le concedió el título de Regidora Perpetua de la ciudad de León.
El Santuario de la Virgen del Camino está situado en el pueblo del mismo nombre, a 6 kilómetros de la región de León y junto a la carretera León-Astorga.
La Virgen del Camino es también conocida como Patrona de las carreteras y protectora de los viajeros, además de Regidora Honoraria y Perpetua del ayuntamiento de Valverde de la Virgen. El 15 de septiembre tiene lugar su celebración litúrgica.
A la Virgen del Camino se le reza buscando protección ante enemigos y buena fortuna. A ella, le piden aquellos que emprenden viajes peligrosos y los necesitados de mejor suerte.
Oración a la Virgen del Camino para protección y ayuda:
- Los que desean que sus caminos se abran, le dedican la siguiente oración durante 21 días:
¡OH! Madre Virgen del Camino, esperanza nuestra, abogada nuestra,
Acógeme bajo tu protección, guíame y condúceme por el buen camino
Que mis enemigos no me persigan, ni con enredos; que ojos tengan y no me vean;
Que tengan manos y no me toquen; pies tengan y no me alcancen
Y si pensamientos tienen, no me piensen.
¡OH! Poderosa Virgen del Camino, sublime influencia del Padre Eterno,
Invoco tu ayuda por medio del Espíritu Santo, para que la buena estrella brille en mi camino
Invoco al Dios de las alturas para que mi hogar y mi vida prospere,
Que mi persona reciba un mensaje de suerte y protección, imploro tu suprema Majestad.
Cúbreme con tu manto de gracia
Quiero paz, tranquilidad, prosperidad y armonía
Cúbrenos con tu velo de gracia y el esplendor de tu magnificencia,
Amén.