El misterio y las historias envuelven a esta planta de una manera extraordinaria. Una rosa que resucita a pesar de marchitarse completamente…
Son varias las leyendas que recaen sobre la Rosa de Jericó, pues se dice que, por siglos, esta planta ha sido protagonista de numerosos hechizos y de los más asombrosos rituales mágicos.
Se cuenta que, en el siglo XIII, un caballero catalán llamado Guillaume, regresó de las cruzadas con varias plantas, convencido de que tenían propiedades mágicas.
Cuando llegó a casa vio que su hijo había enfermado y tenía lepra, por lo que, confiando, colocó la rosa de Jericó en agua bendita y la dejó 9 días.
Después de estos días le pidió a su hijo que se lavara la cara con ella. Cuenta la leyenda que el niño se curó casi de inmediato.
Leyendas que rondan a la mágica planta
La Iglesia católica también posee algunos datos sobre la Rosa de Jericó. Se dice que cuando María y José se vieron obligados a huir de su hogar por la persecución de Herodes, para poder salvar al niño Jesús de la matanza que había ordenado el tirano rey, debieron cruzar el desierto.
Cuando culminaron su recorrido, María bajó de su asno y en el mismo momento apareció una flor a sus pies y la Virgen le dijo a José, que la planta salía a saludar al Niño Jesús.
En otra ocasión, Jesús estaba orando en el desierto y llevaba días sin beber una gota de agua. Mientras lo hacía, una flor acabó en sus pies.
El viento trajo a él la Rosa de Jericó. Pasaban las horas y no había ni gota de agua por ningún sitio.
Entonces, llegó la noche y la humedad de la noche del desierto hizo que las gotas del rocío se quedaran posadas entre las ramas de la flor y de esa manera pudo beber.
Se cuenta que cuando Jesús murió crucificado, todas las Rosas de Jericó quedaron secas. Pero como Él, tres días después resucitaron y volvieron a estar verdes.
Curiosidades y significado de la Rosa de Jericó
La Rosa de la Resurrección
La Rosa de Jericó es originaria de los desiertos de Arabia y de las áreas bañadas por el Mar Rojo, es un helecho de gran resistencia a la desecación.
Sus leyendas y su apodo como Rosa de la Resurrección devienen de que la planta es capaz de secarse por completo y volver a resurgir cuando entra en contacto con el agua.
No solo se la conoce como rosa de Jericó, sino también la llaman doradilla que significa justamente, planta de la resurrección.
Este último apodo vuelve a reafirmar todas las ideas mágicas que la envuelven.
¿Qué propiedades posee esta planta? ¿Por qué resucita?
No obstante, su capacidad de resucitar viene de la molécula Trehalosa, que se encuentra también en algunas algas marinas y hongos, y tiene a su cuidado, la hidratación o deshidratación de los organismos.
Rosa de Jericó es también un nombre asociado a la ciudad de Jericó, que hace unos 2000 años era un importante centro comercial en el cual se expedían, entre muchas otras cosas, plantas medicinales y aromáticas.
La Anastatica hierochuntica, nombre científico de la Rosa de Jericó, tiene la capacidad de revivir una vez seca.
Cuando se encuentra en un clima poco favorable, sus hojas y sus flores comienzan a caerse, las raíces se desatan de la tierra y las partes secas se doblan hasta formar un bulto a ras de suelo.
Y no solo revive cuando entra en contacto con el agua, sino que también se desplaza kilómetros con la ayuda del viento.
¿Cómo podemos cultivar esta poderosa planta?
La Rosa de Jericó se cultiva de manera muy sencilla y prácticamente en cualquier país o tipo de clima, ya que es muy resistente.
Podemos plantarla en nuestro jardín o tenerla en nuestro hogar, sus poderes protectores también actuarán en el espacio donde la coloquemos como un elemento para la buena suerte y espantar malos ojos.
Los requerimientos para conseguir que se asiente en la tierra y crezca son pocos:
- Durante las primeras etapas de crecimiento, se recomienda ubicarla en zonas protegidas de los vientos, para que no se traslade de lugar.
- La Rosa de Jericó necesita sol.
- Debe estar húmeda para mantenerse verde, por tanto, los riegos deben adecuarse a ello.
No solo espirituales, también posee propiedades medicinales
Se le conocen también propiedades medicinales que ayudan a la curación de nuestro cuerpo.
Por estas bondades, la Rosa de Jericó se ha utilizado por siglos en rituales contra numerosas dolencias.
En los aspectos que más puede ayudar esta planta es con las heridas, pues ayuda a que sanen más rápido.
Además, tiene propiedades diuréticas y se emplea en el tratamiento de enfermedades de ese tipo.
¿Qué creencias están asociadas a la Rosa de Jericó?
Se dice que, en la era antigua, la Rosa de Jericó se utilizaba de manera espiritual en numerosas cuestiones.
Por ejemplo:
Adivinadora del clima
- Se usaba como elemento adivinador del clima debido a que la planta cambia de forma respecto a la humedad del ambiente.
Así permitió pronosticar con exactitud cómo sería el clima de los próximos días.
Si la planta estaba seca y cerrada, significaba que no verían lluvias pronto.
Por el contrario, si comenzaba a abrirse y volverse verde, pronto disfrutarían de precipitaciones abundantes.
Poder sobre el parto y la longevidad
- Las leyendas árabes por su parte, cuentan que la flor influye en el parto de las mujeres.
Se decía, además, que aportaba longevidad a las personas, mito que también se ha difundido en España y México.
Protectora de hogares y proveedora de buena fortuna
- Igualmente se considera aún a la Rosa de Jericó sacra y mágica.
Por las características asociadas a ella, se cree que la planta absorbe las energías negativas del lugar y las transformaba en buena vibra y suerte y fortuna para los que se encuentran en ese espacio físico.
Hace tantos años que se utiliza esta planta que ha adquirido varios usos mágicos. Uno de los más destacados es que tiene la propiedad de bendecir y proteger casas.
Además, se cree que tiene la capacidad de atraer la suerte, el dinero y la fortuna en los negocios.
Por ello muchas personas siembran esta espiritual planta en sus casas y también decoran con ella sus locales de trabajo o sus negocios.
La Rosa de Jericó en Cuba
Muchas son las versiones que existen sobre la entrada en Cuba de este peculiar helecho.
Algunos dicen que llegó de manos de emigrantes moros procedentes de Puerto Rico a Santiago de Cuba, hace más de 200 años.
Otros, relatan que la primera planta fue trasladada desde Jerusalén a la ciudad de Cienfuegos a inicios del siglo XX, por el cura Monseñor Manuel Ruiz.
También existe una historia sobre un comerciante sirio que, en su paso por Matanzas, le obsequió un ejemplar de la planta a una señora que se encontraba embarazada para que tuviera un alumbramiento seguro.
En la Isla también se toman en cuenta las propiedades espirituales de esta planta y se siembra en muchas casas, en aras de obtener su protección y eliminar la energía negativa.
Igualmente, la Rosa de Jericó se usa en rituales para atraer el amor y la prosperidad económica.
Dedicamos esta oración a la «Rosa de Jericó»
- Para ello, se emplea en numerosas ocasiones, la siguiente plegaria destinada a la Rosa de Jericó:
Yo te adopto, Flor de Jericó y te doy la bienvenida a mi hogar, para que finalice tu errar por los desiertos y encuentres en este humilde hogar tu mansión definitiva.
Te doy el nombre de (elige un nombre que te guste o tenga un significado especial) y prometo cuidarte siempre.
Te ruego que protejas mi casa de todo mal, por la bendición que de Jesús recibiste y su infinita misericordia.
Divina Rosa de Jericó, por la bendición que recibiste, la virtud que encierras y el poder que te concedió el amor de Jesús y su infinita misericordia
Te ruego que me ayudes a encontrar la suerte en mi camino y a anudarla fuertemente a mí, para que no me abandone jamás.