Para elaborar un altar en el Día de Muertos cada 2 de noviembre, existen elementos que no puedes obviar.
¿Cómo preparar un altar para celebrar el Día de Muertos?
La presencia de la flor de Cempasúchil es primordial, pues desde tiempos remotos dicha flor ha servido como puente entre el mundo de los vivos y los muertos, brindando a su vez un color hermoso al altar.
Con los pétalos de esta flor se realiza un camino para que las almas guíen sus pasos hacia el reino de los vivos.
El altar debe encontrarse acogido por un arco de flores, elemento que simbolizará el umbral por el que penetrarán los espíritus para ingresar en la tierra.
1. Las fotos serán la muestra de que los difuntos no han sido olvidados
Si deseas que la familia vuelva a estar reunida, es preciso que coloques en el altar sus fotografías, así los difuntos tendrán licencia de entrar en el plano terrenal.
Las fotos serán un llamado y la muestra de que los que continúan su paso en el reino de los vivos no los han olvidado.
Sobre el altar se pueden situar pertenencias queridas por los fallecidos y con esto se garantizará que su llegada sea más rápida y acogedora.
2. Las cintas otorgan al Día de Muertos un carácter festivo
Las cadenetas, el papel picado o las cintas otorgan al Día de Muertos el carácter festivo que debe primar en esta fecha, al ser la oportunidad que las almas tienen de encontrarse justo al lado de sus seres más queridos.
Con colores brillantes se confeccionan las cadenetas para dar a entender que el alma es inmortal y que el cuerpo muere, pero el espíritu mientras sea recordado jamás dejará de existir.
3. Estar en familia es el verdadero propósito del Día de Muertos
Sobre el altar se colocan frutas y comida, priorizando los platillos que eran del agrado de los fallecidos, a modo de ofrenda a sus almas, garantizando de esta forma que se sientan atendidos.
En este día los vivos y los muertos comen juntos, reunidos bajo un mismo cielo y atraídos por un único propósito:
- Estar en familia.
4. El pan de muerto representa el ciclo de la vida
El pan de muerto simboliza el ciclo de la vida y la rueda de la fortuna, demostrando que el azar en ocasiones sonríe y otras veces no.
Adjunto a los alimentos se coloca un receptáculo de sal, ingrediente necesario para la vida.
Debe colocarse una copa con agua representando la pulcritud y la pureza del espíritu.
5. La luz de las velas hacen que las almas no se pierdan de camino a casa
No pueden faltar las velas, tanto las de cera como las de aceite garantizarán con su luz que las almas no se pierdan de camino a casa.
Es usual ver decorados los altares con rehiletes, los ancianos creen que cuando el viento hace girar los rehiletes los espíritus ya se encuentran dentro del hogar.
6. La cruz sobre la mesa del altar encarna la fe
Las catrinas de azúcar son un elemento imprescindible en este día, pues representan a los muertos a la vez que muestran el lado dulce de la vida.
La cruz sobre la mesa del altar encarna la fe, premisa en la que el hombre se apoya para sobrevivir.
En algunos hogares se coloca una vela sobre el tronco de una mata de plátano por cada persona fallecida.