La religión yoruba tiene como principal figura de veneración a Olodumare, Dios supremo y creador de todo lo que existe, la deidad a la que todo yoruba le debe extrema devoción.
Luego se incluyen en el Panteón Yoruba, numerosas deidades creadas por él, que se subdividen según sus poderes, en Orishas de cabecera, mayores y menores.
Deidades cosmogónicas:
Varios estudiosos de la religión yoruba quisieron dar un orden científico a la representación de los Orishas según sus acciones en la tierra y los elementos con los cuales se relacionan.
Así, se realizó un esquema que las agrupa en deidades:
- cosmogónicas,
- telúricas,
- del quehacer humano y
- adivinatorias.
Abordaremos ahora el primer grupo, el de los creadores de la Tierra y los hombres, el grupo de las deidades cosmogónicas, que se caracterizan por ser las primeras y creadoras de las demás deidades, asociadas a las fuerzas del universo y de la creación.
La cosmogonía es una narración mitológica relativa a los orígenes y evolución del mundo, el ser humano y el universo.
A continuación, describimos cada deidad de este grupo:
Olodumare: Dios Supremo
El Creador por antonomasia. Olodumare creó la vida humana en la Tierra y veló por su formación y mantenimiento.
Es Dios, es la creación, el más grande, la deidad de la perfección de todo lo humano. Olodumare es la fuente primordial de la energía vital. Se dice que diferentes tendencias de la divinidad se integraron a aquellos a quienes puso a cargo de velar por los hombres y por la vida en la Tierra: Obatalá y Oduduwá
Su nombre proviene del Yorùbá Olòdúmàré, lo cual significa Señor al que va nuestro eterno destino y es la manifestación arterial y espiritual de todo lo existente. No está en contacto directo con los hombres, sino a través de los que se consideran sus otras formas Olorún u Olofin.
Los Yorubas lo representan en un güiro con dos mitades, la superior, simboliza los estados astrales elevados y la inferior, la tierra. Cuando se menciona su nombre debe tocarse el piso y besar la huella de polvo de los dedos por respeto.
Obatalá: Agente creador de Olodumare
El Orisha Obatalá es una de las sietes deidades mayores y principales de la religión yoruba y nació como una encarnación de Olodumare.
Su primer encargo fue el de crear la Tierra, pero debido a Eshú, la deidad regente de lo malévolo, no pudo concluir su labor y Olodumare le dio la tarea de terminar el mundo, a Oduduwá.
Cuentan las leyendas que luego de esto, Obatalá y su esposa Yemmú, fueron los padres de los guerreros del monte, Oggún, Oshosí, Elegguá y Osún y también del gran Shangó y el adivino Orula, por ello es este Orisha el más justo de todos, como padre de los demás santos que acuden a él como juez y padre honorable.
Obatalá fue el responsable de que Olodumare repartiese su poder entre los orichas y es una figura sumamente importante para las deidades, pues representa al mismo Olodumare en la tierra. Es quien juzga a los hombres en este mundo y los prueba, con mucha paciencia e inteligencia.
Oddudúa: Agente creador de Olodumare
Orisha de los deseos, se le adjudica la creación del mundo junto a Obatalá.
Es una masa espiritual muy poderosa que no tiene forma ni figura. Representa los misterios y secretos de la muerte. Oduduwá se vale de los espíritus para manifestarse y vive en las tinieblas profundas de la noche con un solo ojo fosforescente.
Su representación material alude a la formación del mundo, del cual forman parte el reino animal, el vegetal y el mineral.
Está especialmente relacionado a Orunmila el adivino, Obatalá Obalofun y a Oshún la diosa del río. Fue el primer Oní (rey) y fundador de Ife, de donde nació la vida. Su nombre proviene del Yoruba Odùdúwá Señor del otro mundo o de nuestro destino.
En África, muchas veces se considera a Oduduwá como el dios creador, antecesor de Obatalá, mientras que en otras regiones se le muestra como esposa de este.
Para algunos fieles cubanos, Oduduwá es el Santísimo Sacramento o San Manuel en el sincretismo católico.