Rezos a Iroko al pie de la Ceiba para que conceda Nuestros Deseos

Iroko es un Orisha relacionado a los deseos, ya sean buenos o malos, su ashé le da abrigo a aquellos que necesitan de la sombra que producen sus ramas para descansar y luego seguir adelante.

Iroko es un Orisha poderoso que vive en la ceiba. Es santo, varón y anciano, aunque algunos creyentes indican que realmente es hembra.

Su espíritu sagrado que vive en la Ceiba, para algunos habita en la raíz mientras que para otros es en el follaje donde vive. Todos los Orishas se veneran en Irokó, árbol ancestral con gran valor religioso.

En la espiritualidad, la ceiba es un árbol muy venerado entre africanos, para los yorubas está relacionado a un camino de Obatalá y es el trono o bastón de Olofi.

Por su sagrado significado y valor espiritual en la Osha este árbol no se corta, ni se quema y para derribar uno de ellos, hay que consultar con un babalawo y pedir el permiso de la deidad.

Entre las ofrendas de Iroko se le inmolan toretes jóvenes que aún no se hayan apareado. Y a la luz de las velas encendidas para invocarlo se le ofrecen gallina, gallos, pollos, pato y guanajos, todos blancos, por la relación de Iroko con Obbatalá.

¿Cómo le pedimos al Orisha Iroko?

Iroko puede ayudarnos a conceder nuestros deseos, abrir caminos y traer salud y abundancia, y esto nos recuerda también la tradición habanera de darle tres vueltas a la Ceiba del Templete mientras pedimos un deseo.

A Iroko acudimos a rezar y le confiamos nuestras metas, nuestros secretos y nuestros más profundos anhelos, para que el espíritu de la Ceiba nos escuche y nos ayude.

Le ofrecemos una vela encendida y le pedimos que escuche nuestros ruegos y nos ayude a hacerlos realidad. Recordemos que debemos ser agradecidos hacia Iroko cuando nos concede su gracia.

A Iroko se le ponen ofrendas similares a las que se le hacen a los Eggunes (espíritus) al pie de la Ceiba, a la cual también se le ata un paño rojo y se bendice, pues la deidad está estrechamente relacionada con los espíritus.

Podemos pedirle en el hogar, pero si tenemos la oportunidad de ir al pie de la Ceiba acudimos a rezar y a pedir que nuestros deseos se cumplan, con mucha fe y confianza en los poderes de Iroko.

Así le rezamos a Iroko para que nos ayude con una petición especial:

Espíritu de la Ceiba, Iroko bondadoso y protector, tú que intercedes por los hombres y los abrigas con tu manto de bendiciones
Orisha del caminante, tú que extiendes tus ramas y cobijas a tus hijos, protegiéndolos así de todo mal
Iroko, espíritu sagrado, tú que guardas todo lo que se venera en el mundo
Escucha mi petición santo mío, y no me desampares en estos momentos de dificultad
Iroko, que resguardas todo lo que es sagrado y querido, y orgulloso te alzas como vigía del panteón yoruba
Te pido, Espíritu de la Ceiba, que me concedas (hacer la petición con mucha fe)
Y que alejes de mi camino el dolor y la desgracia, trayendo en cambio la alegría y la dicha
Envuélveme en tus ramas para que nunca sufra y protégeme con tu sombra para que pueda seguir caminando hasta alcanzar mis metas
Permite Iroko, que logre todo lo que me he propuesto en la vida, para así caminar siempre agradecido por tus bendiciones
Mi santo, intercede siempre por mí para que no caiga ante las malas influencias ni los deseos negativos
Así sea