Celina González, la reina de la campiña, la cubana entre cubanas, la inigualable…
Celina es también exponente de la expresión cultural afrocubana y su legado se conserva para conocimiento de todos los religiosos asociados a la Regla de Ocha (santería).
Su biografía indica que el talento musical venía como tradición familiar:
“la artista cubana nació en 1928 en un humilde hogar campesino de Jovellanos (Matanzas), y desde pequeña empezó a cantar en los guateques que sus padres organizaban en casa en los momentos de descanso, donde se tocaba el laúd y el tres y los invitados improvisaban décimas”.
Celina, música y religión
Celina contó con gran espiritualidad que, al cumplir 20 años de edad, se le apareció Santa Bárbara, y le explicó que, si le dedicaba su devoción y su arte, la haría triunfar y la protegería toda la vida.
Así ella decidió seguir el consejo de la santa que en la cultura afrocubana está sincretizada con el Orisha Shangó, deidad de la música y los tambores en la religión yoruba, y le rindió devoción a través de su talento y su voz toda su vida.
De hecho, Celina González se hizo famosa con aquellas décimas que le dedicó a Santa Bárbara que hoy son himno de homenaje a las deidades en Cuba y en otros países de América.
Su legado le dio a la religión afrocubana, un rol preponderante dentro de su cultura musical y a las deidades les dedicó numerosas canciones que relatan leyendas y hablan de la devoción y el amor que desde Cuba se les profesa.
Canciones a los Santos y Orishas
Según los investigadores de su obra, la artista cubana unió la base melódica y rítmica del canto guajiro a la devoción por las religiones criollas de Cuba, y de los orishas.
Combinaba las décimas y cuartetas típicas de los guateques con temas de deidades yorubas que pronto se hicieron muy populares en toda Cuba y reconocieron notablemente a la cultura afrocubana.
Así, podemos destacar canciones de Celina como “La reina del mar” dedicada a la Virgen de Regla sincretizada con la Orisha Yemayá, “El hijo de Eleguá” y “A la Caridad del Cobre” Patrona de Cuba, además de exponentes de otros autores como “Lágrimas negras” y “Me tenían amarrao con P”.
Una de las canciones más populares que representa un regalo de Celina a la música afrocubana, se titula ¡Que viva Shangó!, una plegaria hermosa que la cantante dedica a Santa Bárbara Bendita y al Rey yoruba Shangó, su letra es un rezo para que la santa y el orisha nos entreguen su bendición.
Letra de canción ¡Que viva Shangó!
Santa Bárbara bendita para ti surge mi lira
Santa Bárbara bendita para ti surge mi lira
Y con emoción se inspira ante tu imagen bonita
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó!
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó, señores!
Con voluntad infinita arranco del corazón
La melodiosa expresión pidiendo que desde el cielo
Nos envíes tu consuelo y tu santa bendición
Que viva Changó Que viva Changó
Que viva Changó Que viva Changó, señores
Virgen venerada y pura, Santa Bárbara bendita
Virgen venerada y pura, Santa Bárbara bendita
Nuestra oración favorita llevamos hasta tu altura
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó!
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó, Señores!
Con alegría y ternura quiero llevar mi trovada
Allá en tu mansión sagrada donde lo bueno ilumina
Junto a tu copa divina y tu santísima espadaEn nombre de mi nación Santa Bárbara te pido
En nombre de mi nación Santa Bárbara te pido
Que riegues con tu fluido tu sagrada bendición
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó!
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó, Señores!Yo también de corazón te daré mi murmurio
Con orgullo y poderío haré que tu nombre suba
Y en el nombre de mi Cuba este saludo te envío
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó!
¡Que viva Changó! ¡Que viva Changó, Señores!